jueves, 4 de abril de 2013

Una estafa menos

Escribe:
Luis E. Rodi Maletich


La Municipalidad de Pinamar acaba de poner fin a una de las tantas estafas que los pinamarenses sufrían en su bolsillo al eliminar ese subsidio encubierto para un periódico que era el Boletín Oficial. Felicitaciones, más vale tarde que nunca.

La decisión llega después de haber comprobado de forma acabada ante las autoridades que, como venimos sosteniendo hace años, la cantidad de ejemplares que debía realizar el medio que publicaba el Boletín Oficial era incumplida, y por lo tanto se transformaba en una estafa real a la población.
La estafa era doble. Primero, a los posibles medios competidores, porque en las licitaciones se les obligaba a cotizar utilizando una base de ejemplares que no era real. Con el consabido encarecimiento del producto. Mientras el medio estafador podía presentar una suma más baja porque, total, no pensaba nunca editar esa cantidad de ejemplares.
La segunda estafa era contra la gente, porque muchos no recibían el Boletín Oficial debido a que la exigua tirada de ejemplares del medio que era escogido por Prensa Municipal no alcanzaba a llegar a sus supuestos destinatarios. Si un medio dice publicar ocho mil ejemplares y en verdad ni se arrima a ese número, está mintiendo. A la Municipalidad, a la gente y también a sus anunciantes, que pagan muy caro algo que no vale ni dos céntimos.

Cuando este medio ganó oportunamente la licitación para realizar el Boletín Oficial –a comienzos de siglo- se ocupó de respetar la cantidad de ejemplares solicitada, llevando los ejemplares a oficinas gubernamentales para su control. Y sólo después de eso eran distribuidos, en la cantidad exigida en el pliego licitatorio, por las localidades del partido.
Cuando la repartición de prensa decide tomar la palabra a un medio y colocar como piso de licitación una suma de ejemplares que ese medio no piensa imprimir –y sólo se coloca la cifra para que los competidores tengan que licitar por el valor real-, cuando se adjudica el trabajo a un medio que dice realizar una cantidad de ejemplares y en realidad edita una cantidad mucho menor, en realidad es un subsidio encubierto para que ese medio, el Piojero del Guasón Víctor Pardo y Crosty Mattioli, pueda hacer frente a sus obligaciones financieras en una época de crisis.

Era resorte de Prensa Municipal corroborar la veracidad de la cantidad de ejemplares tirada, pues hacer menos a menos costo representa una estafa, pero nunca lo hizo y sólo fue después de reiteradas denuncias que la Municipalidad tomó esta decisión. Como escribí antes: más vale tarde que nunca. Una estafa menos. Y la certeza que siempre hay funcionarios honestos que cumplen su labor como corresponde y cuidan el dinero de la gente. Bien por ellos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario