Reunión del CAU
En la mañana de hoy en una comisión ampliada del CAU, los concejales Santini, Ventoso, Ocampo, Paso, Rapallino y Ávila recibieron a diferentes instituciones intermedias para escuchar todos juntos el informe del Lic. Leandro Rodrígues Capítulo.
El profesional inició su informe explicando las características del suelo pinamarense, para luego comentar que este proceso se inició con una convocatoria desde la Sociedad de Fomento de Cariló y a raíz de eso se contactó a varias instituciones (CALP, Telpin, Municipio, etc.). Después comentó la metodología de la evaluación hidrogeológica, que incluyó un monitoreo local y regional, con una escala temporal verificando el estado actual del acuífero y un pronóstico; la generación de pautas y de una red de alerta temprana de avance salinos por sobre explotación, que permitiría tomar decisiones al respecto.
En medio de la exposición Ventoso preguntó qué nivel de conexión existe con la Cooperativa de Agua y Luz en relación a los niveles de contaminación del acuífero y los lugares más aceptables para realizar perforaciones, y Capítulo explicó que si bien no asiste ni audita a la CALP existe una buena relación y eso ha resultado en la toma de decisiones de la Cooperativa.
Como síntesis, se establecen los siguientes puntos:
• Existe un aumento demográfico y de explotaciones
• Demanda en aumento
• Demanda de saneamiento
• Falta en fiscalización y control
• Falta de ordenamiento territorial
• Falta de concientización del uso del agua
• Aumento en época estival
La pregunta más importante planteada a Rodrígues Capítulo, y la de más relevancia de cara a una posible modificación del Código de ordenamiento urbano fue ¿cuál es la capacidad de carga que soporta el acuífero del partido? En respuesta, el Licenciado ofreció una explicación que abarcaron aspectos técnicos y específicos, dentro de los cuales se requirió separar los diferentes tipos de reservas, explicó que basado en el estudio de las variables del año 2012, la capacidad de carga dio negativa (-3.80); sin embargo, aclaró Rodrígues Capítulo, hay que tener en cuenta la dinámica del acuífero año a año. Es decir, que el cálculo, tiene validez para este momento, y que si bien no es permanente, Pinamar está cerca de consumir más agua de la que recarga. Por ende, el desafío es establecer políticas públicas tendientes a mejorar esta situación ya sea en la concientización o en la fiscalización de los riegos.
Por otro lado, Rodrígues Capítulo planteó que más allá de la cantidad de agua, se debe analizar la calidad de agua, y por eso, se debe apuntar al saneamiento. Luego, Paso le preguntó al profesional cuál es el diagnóstico, de cara a una renovación del Código, y Rodrígues Capítulo planteó que es necesario prestar atención a lo que sucederá en los próximos años, esperar a que los estudios estén terminados, para poder conocer el impacto que puede tener y a partir de allí avanzar en el tema. La Arq. Siccardi por su lado, planteó que es necesario monitorear permanentemente los recursos, el agua por un lado, pero el resto también, por eso desde el Colegio de Arquitectos se promueve la creación de un Observatorio de Monitoreo de Recursos Ambientales, para que existe un monitoreo permanente e institucional.
Para finalizar, Rodrígues Capítulo cerró su exposición, y en conjunto se establecieron una serie de parámetros a evaluar como comunidad, de cara al futuro hídrico de Pinamar.
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