viernes, 14 de marzo de 2014

Conflicto docente

Agencia Nova
En compañía del ministro de Salud, Alejandro Collia, y el  titular de la Secretaría General de la Gobernación Martín Ferré, el jefe de Gabinete de la Provincia, Alberto Pèrez anunció que la mayoría de los gremios representantes de los trabajadores estatales aceptaron la propuesta extendida el miércoles al mediodía. Resaltó la “responsabilidad” de los trabajadores y llamó a los docentes a que “reflexionen”.  
Pérez pidió que “acaten la conciliación obligatoria que dictó el Ministerio de Trabajo” para permitir que “nos volvamos a sentar en la mesa paritaria”. Y añadió: “Necesitamos que reflexionen y que comiencen las clases en la Provincia”.
El jefe de Gabinete también se refirió a la iniciativa del vicegobernador Gabriel Mariotto, que busca establecer a la educación como un servicio esencial, al que calificó como “un proyecto del gobierno de Daniel Scioli, quien cree que este es el momento de dar el debate en la Provincia sobre la necesidad de establecer que la educación es un servicio fundamental”.
En este sentido, indicó que lo harán “derogando una ley del entonces gobernador Felipe Solá, hoy diputado nacional del Frente Renovador, que le quitó esa calidad de servicio esencial a la educación”
“Creemos que vamos a poder armonizar el derecho a la huelga con el derecho a aprender, que no sean derechos en pugna, sino que puedan convivir”, agregó Pérez.
Fuente Utopías
Ocho días sin clases
Los gremios docentes ya no saben que hacer ni que decir; simplemente no quieren dar marcha atrás con sus dichos.
Se sienten omnipotentes y copiando a Moyano se creen con derechos de parar un país.
Señores, la educación no se cotiza en dólares, no puede estar en manos de gente autoritaria.
Empezando por la DGE (Dirección General de Escuelas) donde  cada docente, no tiene un legajo único sino que por un lado  va el legajo estatal y por otro el privado en caso de docentes con doble y hasta con triple turno. 
Hay en la provincia trescientos veinte mil trabajadores educativos de los cuales el 20% tienen registro por ausentismo, licencias por diferentes motivos, pero la sorpresa es que se observa un 30% de suplentes, esto es un 10% más y significa que existe  suplentes de suplentes, todos cobran.
Los chicos con  la variedad de maestros cada uno con su librito, si terminan bien el año, son unos genios.
Enfocado a Pinamar, la situación no cambia de ahí que  muchos padres  resuelvan enviarlos  a escuelas privadas, donde se mantiene el respeto a los educandos. Pero  el objetivo es jerarquizar la escuela pública, defenderla; tarea dura con esta clase de gremio y de docentes  que hay  en el país. 

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